Este número incluye artículos de investigación y de revisión que conciernen al espíritu de esta época, vinculado al fin de la pandemia, a la guerra. Acontecimientos que tuvieron lugar, que producen efectos y conmueven al orden simbólico.

En El Otro que no existe y sus comités científicos, Laurent, comenta a pensadores y eruditos de la actualidad. Revela -una vez más- el imperio de los semblantes. La recurrencia y promoción de los comités científicos; sus limitaciones y tribulaciones.

Roy, alude a la guerra en Ucrania, al monólogo de la no palabra, la injuria.

R. do Rêgo Barros, refiere al nazismo como posible inspiración para la constitución de nuevos universales humanos.

Acompaña una muestra, Galería 2020. Espacio creado en la pandemia por un colectivo de artistas de zona norte de CABA, que nos recuerda que el arte no está hecho para la razón sino para el disfrute y la imaginación.

Además, el interés por la transferencia, lo femenino, la cuestión Trans porque “La clínica cambia!” al estar ligada desde siempre al estado contemporáneo de la cultura.

O. Meseguer constata la transferencia y la expresión supuesto-saber-leer-de-otro-modo en el ultimísmo Lacan.

M. Ricciardi repasa el no-todo, lalengua y el cuerpo.

B. Musachi, debate sobre la disforia de género aplicada en niños y adolescentes.

P. Álvarez Bayón, se pregunta ¿qué hay de real en el género?.

Abarca eventos literarios. M. Goldenberg, presenta La intolerancia que equipara a un tratado de las intolerancias. M. Klainer exhibe TRAUMA Σ y se pregunta sobre qué permite en la clínica el movimiento lógico del trauma al síntoma. V. Hernández, al anunciar El muro de la anorexia, elogia el trabajo de investigación en el ámbito de la orientación lacaniana, concerniente a la clínica de la anorexia.

Dispensa lecturas y aplicaciones. P. Iturriza y J. Rico, discurren sobre el mundo de las no-cosas de Byun-Chul Han.

R. Ubieto, ofrece una lectura sobre el dominio de la violencia.

García Martínez señala las discordancias –a veces- entre el discurso de la ciencia y el de la tecnociencia y todo presentado como entretenimiento.

F. Gamarra, investiga sobre la noción de vacío y función del trazo.

J. Caretti, analiza qué cuestiones del discurso capitalista conciernen al Psicoanálisis.

A. M. Wilson Maia, estudia el uso de los sueños de niños en un análisis.

L. M. Coletti, en la civilización del régimen de la diversión, explica el partenaire-máquina.

M. Rodríguez Méndez y la pregunta inexorable por las posibilidades de existencia del psicoanálisis lacaniano.

Contamos en Lacantubers, una clase clínica de Domenico Cozensa. Agradecemos a Juan Mitre el ofrecimiento de semejante material de estudio para nuestra publicación.

Ultimando, son todos trabajos que invitan a conversar no sin dar suficiente importancia a la pausa o intervalo de silencio entre las palabras, insinuando orientaciones.